La prueba citológica, UNA ALIADA de las mujeres

En San Antonio de los Baños desde la atención primaria se desarrolla con prioridad el programa de Citología. A propósito del tema conversamos con Yamiley Ramos, jefa del Programa en el Policlínico #1 Hipólito Pazos, sobre los beneficios que reciben las mujeres ariguanabenses con la realización de la prueba citológica.

Al hablar de prevención del cáncer de cérvix pensamos siempre en la prueba citológica quisiera comenzar por esta idea.

En efecto desde su introducción hace más de 50 años, la prueba de Papanicolaou o prueba citológica como se le conoce se ha utilizado en todo el mundo para identificar lesiones precancerosas para su tratamiento o seguimiento. El uso rutinario de las pruebas de detección en todo el mundo contribuye a una reducción de entre el 70% y el 80% de la incidencia de cáncer de cuello uterino desde la década de 1960.

La realización de pruebas de detección de cáncer de cuello uterino en mujeres sexualmente activas, actualmente o en el pasado, puede determinar si están en riesgo de desarrollar cáncer de cuello uterino. Esta determinación puede realizarse al examinar las células, que se retiran sutilmente del cuello uterino usando la prueba de Papanicolaou.

¿Qué mujeres están incluidas en el programa?

Todas las féminas de 25 hasta 65 años, se incluyen también las mujeres con vida sexual activa antes de esta edad, la prueba citológica permite de manera eficaz la detención de alguna anomalía o alteración, es acertada en la detención del cáncer de cérvix.

Existe algún requerimiento especial

NO solo se deben cumplir con los requisitos de no relación sexual 48 horas antes de realizarse el examen, no tener la menstruación o realizarla cuatro o cinco días después de retirada. Después de parida o de alguna interrupción de embarazo y otras manipulaciones del cuello también no estar bajo tratamiento de pastillas u óvalos vaginales. 
  
¿Qué opinión le merece esta prueba a partir de su experiencia y resultados de aplicación?

El método de detección es eficaz, preciso, económico, indoloro y sencillo de realizar; además valoremos que social y culturalmente es aprobado, la prueba no tiene efectos adversos y los resultados son a corto plazo. Tal servicio no solo es gratuito, sino que además se realiza en todos los consultorios del Médico de la Familia con las condiciones de higiene y privacidad adecuadas, y encima de eso el resultado es informado después a cada mujer, ya sea positivo o negativo.
¿En qué consiste la citología vaginal o test de Papanicolau?

Consiste en tomar una muestra de células de la vagina y del cuello del útero con un raspador de madera o un cepillo cervical pequeño. La muestra se pone en un portaobjetos de vidrio y se conserva en fijador o se enjuaga en un vial de fijador y se envía al laboratorio para que sea examinado.

¿Con qué frecuencia se recomienda?

Como regla general, es recomendable hacerse la primera citología a los 3 años de comenzar a tener relaciones sexuales, o a partir de los 25 años. Después hay que hacerse una citología cada 3 ó 5 años, siempre que en 2 exámenes anuales los resultados sean normales y que no haya factores que aumenten el riesgo. Si las mujeres se realizan periódicamente citologías vaginales, esto ayuda a mantener baja frecuencia de este cáncer en las mujeres.

En estos momentos ¿qué dificultades enfrenta?

Ninguna material pero sí debemos hablar de que aún la enfermera del consultorio médico presenta inconvenientes pues en el accionar con la población del área de salud que atiende existen todavía conductas evasivas que asumen algunas mujeres cuando les ‘toca’ la prueba citológica. Una y otra vez se ve precisada de citarlas para dicho examen, y una y otra vez, se ausentan. Entre los argumentos alegan no disponer de tiempo o que sienten temor a los resultados. Insistimos que el territorio cuenta con suficientes KIT de toma de muestras son desechables y poseen garantía de uso, por tamaño incluso, de acuerdo a la paciente. 

¿Cuáles son los beneficios?

La citología vaginal o prueba de Papanicolau sirve para detectar el cáncer o cambios anormales de las células que pueden convertirse en cáncer. No solo es útil para detectar un cáncer, sino que también detecta lesiones que suponen un mayor riesgo de contraerlo. También se pueden encontrar estados no cancerosos, como infecciones e inflamación. Cada mujer tiene que sentir la necesidad de visitar la consulta ginecológica, aun cuando se sientan perfectamente. Desde la atención primaria de salud e incluso, con el trabajo cohesionado de los diferentes factores de la sociedad que incluye por supuesto la Federación de Mujeres Cubanas debemos insistir aún más para hacerles comprender el valor de este paso preventivo para su salud sexual, reproductiva y mental. La mujer puede cambiar el cuadro clínico con la sencilla realización de una prueba citológica a tiempo, realizada con sistematicidad, lo cual ayuda a identificar y combatir tempranamente a los NIC y a sus malignas consecuencias.

¿Cuál es el mensaje que usted le trasmitiría?

El cáncer de cuello uterino es el segundo cáncer más frecuente en mujeres después del de mama y el quinto de todos los cánceres. En el caso de Cuba, el sistema de salud da prioridad a tal problemática a través del Programa que prevé la ejecución de pruebas citológicas sistemáticas para prevenir el Cáncer Cérvico Uterino, forma parte del Programa Nacional de Salud desde hace más de tres décadas y constituye un derecho de toda cubana en período reproductivo y en las edades de 25 hasta 65 años en el que es mayor el riesgo de desarrollar este padecimiento como resultado de una neoplasia. De más está decir, que se trata de una prueba necesaria por lo que ha de acudirse de modo consciente al médico de la familia, pues el miedo o cualquier otra justificación solo nos resta tiempo de vida.

Por Cary Díaz