El lavado de manos y su importancia para evitar enfermedades

Por Cary Díaz

Extremar la práctica del lavado de manos para reducir el impacto de las enfermedades infectocontagiosas en el país es el llamado a la población ariguanabense de los trabajadores del Departamento de Higiene y Epidemiología de la Dirección Municipal de Salud, sobre el tema conversamos con Cruselda Estrada, especialista de prevención y promoción de salud.

 ¿Por qué se insiste en que debe intensificarse la práctica cotidiana y sistemática del lavado de manos?

El lavado de manos con agua y jabón es una medida simple, sencilla y de bajo costo. Es una de las recomendaciones que se brinda en el ámbito mundial para evitar los riesgos reales a partir del incremento en la magnitud de las enfermedades diarreicas agudas debido a los problemas ambientales, los comportamientos y estilos de vida de la población relacionada con la higiene, la situación socioeconómica y la baja efectividad en el cumplimiento de las acciones de los diferentes organismos en las acciones de saneamiento ambiental y promoción de la salud, pensemos además que el mundo hoy enfrenta el fuerte impacto del ébola y el lavado de las manos es la clave pues la higiene juega un papel determinante en esta batalla de salud.

El lavado de las manos es la medida de prevención más importante en el control de las infecciones, si las personas no cumplen con esta máxima de salud a qué se exponen

Se exponen o son vulnerables a contraerenfermedades respiratorias, diarreicas y otros padecimientos que se transmiten por contacto, los cuales figuran entre los primeros diagnósticos de consulta y de hospitalización en los centros hospitalarios públicos. Además, el lavado de las manos protege contra enfermedades contagiosas como la hepatitis, la tifoidea, influenza y contra los microbios que se muestran resistentes a los antibióticos. Siempre debe lavarse muy bien las manos, especialmente antes de comer y después de ir al baño.

Acerca de la técnica del lavado de las manos qué puede decirnos

Es importante conocer que la efectividad de esa práctica depende de la realización correcta de la técnica del lavado de manos, por lo que puntualizamos que la duración de esta acción tiene en cuenta mojarse las manos con agua, aplicar suficiente jabón para cubrir toda la superficie de la mano, frotarse las palmas de las manos entre sí, con los dedos entrelazados, el dorso de los dedos de una mano contra la palma de la mano opuesta, manteniendo unido los dedos, rodear el pulgar izquierdo con la palma de la mano derecha, frotándoselo con un movimiento de rotación y viceversa, frótese la punta de los dedos de la mano derecha contra la palma de la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación y viceversa y recuerde enjuagar bien las mano, secárselas con una toalla o material desechable y no manipule la llave de agua, hágalo con auxilio de otro material para que no se exponga al contagio. Las pastillas de jabón deben ser pequeñas y colocarse sobre rejillas que faciliten el drenaje.

El lavado de manos siempre debe realizarse con jabón, aclaramos que emplear sólo agua, no es suficiente. ¿A qué nos referimos?

Por ejemplo, compramos, pagamos y recibimos dinero y al tocarlo nuestras manos se van llenando de microbios. El simple hecho de que tus manos parezcan limpias que no tengan manchas o suciedad, no significa que estén libres de microbios (virus o bacterias) que causan enfermedades. Los virus y bacterias son "invisibles" a la vista humana. El lavado de manos con agua y jabón es un hábito fácil de hacer y es una de las formas más eficaces para prevenir muchas infecciones y enfermedades. Para ello se necesita de ese momento para la eliminación de factores de riesgos, son minutos que dedicamos a tener las manos limpias, con ello evitamos que los microbios de otras personas entren a nuestro cuerpo o que, desde tus manos contaminadas, pasen a tu familia, amigos o a toda tu comunidad.

El lavado de manos es esencialmente con agua y jabón, permite tener resultados positivos para la salud y reducir considerablemente enfermedades diarreicas y respiratorias, prevenir brotes epidémicos, entre otros.